¿QUE LE ESTAMOS DEJANDO A LAS GENERACIONES FUTURAS?
El cambio climático es algo de hoy, no del futuro. Sus severas consecuencias ya se están dejando sentir en todo el planeta, pero al parecer el mundo ha preferido voltear la cara hacia otro lado, hacer como que nada sucede. Hoy por hoy más de 20,000 especies animales y vegetales desaparecen cada año debido a la desaparición de sus ecosistemas. Los expertos afirman que, de continuar a este ritmo, en 2050 se habrá extinguido más de un tercio de todas las especies y la mitad, en 2100. En veinte años se perdieron más de 300 millones de hectáreas de bosques en el mundo, lo que equivale a la superficie total de México o Indonesia. México ocupa el quinto lugar entre los 10 países más deforestado res del mundo con una tasa de más de 600 mil hectáreas por año. Un árbol en un día genera oxígeno para 10 personas, mientras un automóvil consume en una hora el oxígeno que respiran 800 personas en un día. La mala gestión, la falta de infraestructuras y la contaminación son las culpables de que cada año se produzcan 3.500 millones de casos de enfermedades por la deficiente calidad del agua. En África del Norte, 1.300 niños mueren a diario por la sequía, mientras que en las ciudades hay quienes se dan el lujo de desperdiciar 10 litros de agua cada vez que dejan la llave abierta cuando se lavan los dientes. Cada año se producen 2,7 millones de muertes por la contaminación atmosférica. De ellas, 2,2 millones se atribuyen a la mala calidad del aire dentro de los hogares y un 80% corresponde a campesinos de países en desarrollo. Desde 1996 han aumentado en un 50% las inundaciones y las sequías en el mundo. Nuestro mundo hoy no es el paraíso que fue nuestro planeta ¿qué les espera a quienes vienen detrás? ¿Te parece justo a ti, que pudiste y aún puedes descansar bajo la sombra de un árbol, que las futuras generaciones tal vez no puedan hacerlo? A ti que has conocido la belleza natural pero que has vivido explotando a la tierra, destruyendo todo a tu alrededor ¿te parece justo acabar con todo por tu ambición desmedida, por desear tener más allá de lo posible, por sobre poblar, sobre explotar pretendiendo ignorar todo el daño que causas? Si, te hablo a ti ser humano, que por años y años te has dedicado a contaminar y hoy no quieres asumir las consecuencias de tu ambición desmedida, que hoy te niegas a comprender que estás a punto de poner punto final a tu propia historia, destruyendo todo lo que alguna vez construiste. A ti, que te has dedicado a buscar pretextos para no cambiar, que niegas que el calentamiento del planeta sea debido a tu causa y por lo tanto te rehúsas a aplicar medidas para tratar de prevenirlo. Te hablo a ti pero también a mí, pues ni tú ni yo estamos logrando cambiar las cosas al ritmo que se necesita. Es cierto, hace falta voluntad política para hacer muchos de esos cambios que se requieren, pero también hace mucha falta voluntad de toda la sociedad por conocer y entender lo que está pasando, de cambiar, de exigir, de transformar y transformarse. Hace falta que entendamos que la responsabilidad es de todos, jóvenes y adultos, mujeres y hombres, cada uno desde nuestras trincheras. Nos hace falta darnos cuenta de que estamos en una carrera contra el tiempo que inició hace ya mucho, vamos contra reloj y la única solución que encuentro es la que está ahora en ti. En ti, presidente de cada país del mundo, en ti empresario y empresaria, estudiante, juez, ama de casa, profesionista y trabajador. Está en todos y cada uno de nosotros y solamente juntos podemos salvar los cimientos de nuestra casa que se nos está viniendo abajo. ¿Has pensado qué les dirás a tus hijos cuando te pregunten si es verdad que el cielo alguna vez fue azul?
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ResponderBorrarhttps://youtu.be/L-SAy2FA6bw
ResponderBorrar¿QUE LE ESTAMOS DEJANDO A LAS GENERACIONES FUTURAS?
ResponderBorrarEl cambio climático es algo de hoy, no del futuro. Sus severas consecuencias ya se están dejando sentir en todo el planeta, pero al parecer el mundo ha preferido voltear la cara hacia otro lado, hacer como que nada sucede.
Hoy por hoy más de 20,000 especies animales y vegetales desaparecen cada año debido a la desaparición de sus ecosistemas. Los expertos afirman que, de continuar a este ritmo, en 2050 se habrá extinguido más de un tercio de todas las especies y la mitad, en 2100.
En veinte años se perdieron más de 300 millones de hectáreas de bosques en el mundo, lo que equivale a la superficie total de México o Indonesia. México ocupa el quinto lugar entre los 10 países más deforestado res del mundo con una tasa de más de 600 mil hectáreas por año. Un árbol en un día genera oxígeno para 10 personas, mientras un automóvil consume en una hora el oxígeno que respiran 800 personas en un día.
La mala gestión, la falta de infraestructuras y la contaminación son las culpables de que cada año se produzcan 3.500 millones de casos de enfermedades por la deficiente calidad del agua. En África del Norte, 1.300 niños mueren a diario por la sequía, mientras que en las ciudades hay quienes se dan el lujo de desperdiciar 10 litros de agua cada vez que dejan la llave abierta cuando se lavan los dientes.
Cada año se producen 2,7 millones de muertes por la contaminación atmosférica. De ellas, 2,2 millones se atribuyen a la mala calidad del aire dentro de los hogares y un 80% corresponde a campesinos de países en desarrollo. Desde 1996 han aumentado en un 50% las inundaciones y las sequías en el mundo. Nuestro mundo hoy no es el paraíso que fue nuestro planeta ¿qué les espera a quienes vienen detrás?
¿Te parece justo a ti, que pudiste y aún puedes descansar bajo la sombra de un árbol, que las futuras generaciones tal vez no puedan hacerlo? A ti que has conocido la belleza natural pero que has vivido explotando a la tierra, destruyendo todo a tu alrededor ¿te parece justo acabar con todo por tu ambición desmedida, por desear tener más allá de lo posible, por sobre poblar, sobre explotar pretendiendo ignorar todo el daño que causas?
Si, te hablo a ti ser humano, que por años y años te has dedicado a contaminar y hoy no quieres asumir las consecuencias de tu ambición desmedida, que hoy te niegas a comprender que estás a punto de poner punto final a tu propia historia, destruyendo todo lo que alguna vez construiste.
A ti, que te has dedicado a buscar pretextos para no cambiar, que niegas que el calentamiento del planeta sea debido a tu causa y por lo tanto te rehúsas a aplicar medidas para tratar de prevenirlo.
Te hablo a ti pero también a mí, pues ni tú ni yo estamos logrando cambiar las cosas al ritmo que se necesita. Es cierto, hace falta voluntad política para hacer muchos de esos cambios que se requieren, pero también hace mucha falta voluntad de toda la sociedad por conocer y entender lo que está pasando, de cambiar, de exigir, de transformar y transformarse.
Hace falta que entendamos que la responsabilidad es de todos, jóvenes y adultos, mujeres y hombres, cada uno desde nuestras trincheras.
Nos hace falta darnos cuenta de que estamos en una carrera contra el tiempo que inició hace ya mucho, vamos contra reloj y la única solución que encuentro es la que está ahora en ti. En ti, presidente de cada país del mundo, en ti empresario y empresaria, estudiante, juez, ama de casa, profesionista y trabajador. Está en todos y cada uno de nosotros y solamente juntos podemos salvar los cimientos de nuestra casa que se nos está viniendo abajo.
¿Has pensado qué les dirás a tus hijos cuando te pregunten si es verdad que el cielo alguna vez fue azul?